jueves, 27 de diciembre de 2007

La Libertad como Nación

No hay nación más grande que aquella que no te pide nada a cambio para pertenecer a ella. En este sentido, la nación ha de ser un oasis de Libertad, siendo éste el principal valor que germina en la unidad de sus gentes en torno a la idea de ciudadanía. Si el concepto de nación se "disfraza" de "obligaciones morales" se convierte, indefectiblemente, en un concepto opresor, intolerante y liberticida. Y eso y no otra cosa diferencia el patriotismo del nacionalismo: el uno defiende el legítimo orgullo por lo cercano, pero sin desatender el principio de Libertad, de ciudadanía, anterior y superior a la nación misma; el otro, exprime la diferencia, la exigencia de patrones que todos debemos cumplir si queremos ser etiquetados como "buenos gallegos", por ejemplo.

Para el triunfo de la filosofía nacionalista, la coacción moral se hace obligatoria, y se resume en una frase tristemente escuchada actualmente en Galicia, y que rezuma totalitarismo: "vivamos como gallegos". A esta desafortunada frase cabría oponer otra que reflejara al individuo, al ciudadano, por encima de la tribu y que sería más acorde con lo que hoy representa una nación como España: vivamos como hombres libres, sin ataduras ni etiquetas.

Conviene desgajar de la idea nacionalista la idea de amor a lo propio, a lo cercano. Estúpido sería no sentirse cercano al lugar donde has nacido y crecido. Pero de ahí a pretender hacer de eso una especie de totem mitológico que ha de guiar nuestra vida hay un abismo tras el que se esconde el odio, la intolerancia y el totalitarismo. La idea de nación entendida bajo la vieja premisa, territorio, lengua y sangre, es, digámoslo con claridad, una aberración, una ideología llena de odio, de negatividad, y cuyos resultados han sido evidentes a lo largo de la historia.

El concepto nacionalista de nación o país necesita para sobrevivir de la ausencia de Libertad. Se trata de una visión homogeneizante de la sociedad, purista, racista incluso. A menudo escucharemos a los dirigentes nacionalistas frases como: galicia para los gallegos, lengua propia, cultura propia, incluso "pensamientos" propios. Su mensaje tratará siempre de establecer cánones de buen gallego, buen vasco o buen catalán. Ellos dictarán qué se puede hacer y qué no se puede hacer, qué autores se pueden leer y cuáles han de ser silenciados. Todo individuo independiente es sospechoso de no ser "de los nuestros", de ser un traidor. Poco importa lo que diga, el talento que tenga: lo primero es el filtro de la tribu, de la lengua, de la cultura única.

Toda la idea del nacionalismo descansa en la negación del individuo como ciudadano libre. Libre de usar la lengua que le plazca, de sentirse como le venga en gana, y de elegir libremente sus opciones políticas. Es evidente que ningún nacionalismo sobrevive sin opresión. Ejemplos en el norte de España, nos sobran por desgracia. Pero, para aquellos que basan la organización política y social de un estado en el pragmatismo, para aquellos que piensan que es mejor "remar" para casa y mirar hacia otro lado cuando toca ser solidario, para aquellos que creen que se debe preocupar exclusivamente de lo de casa y obviar y aún vilipendiar a los demás, para todos ellos, el nacionalismo ha demostrado, también en eso, un fracaso total.

A lo largo de la historia hemos visto que el auténtico progreso económico y social se ha basado en la cooperación, en el mercado, en la Libertad, en la confianza. A la larga, el nacionalismo hace de sus territorios una isla económica, más preocupada por no "perder su identidad nacional" que por abrirse al mundo y progresar junto con otros territorios. Tiende al aislacionismo, a la autopromoción (otra vez de moda en Galicia), a sacralizar los productos autóctonos aún cuando existan otros mejores y más baratos, a poner trabas a los productos de "fuera" con etiquetados o campañas públicas orientadas a la subvención de lo propio, aún cuando sea ineficiente. En definitiva, el nacionalismo, más temprano que tarde, desemboca en decadencia no sólo social, sino también (y acaso como consecuencia de la anterior) económica.

Toca, pues, defender, una vez más, lo obvio: la Libertad y la cooperación en forma de afecto, de unidad, de apertura, de progreso. Toca reivindicar un concepto de nación cuyos cimientos se basen en dos premisas: Libertad y Justicia. No hay más nación que la que nos permite ejercer una ciudadanía libre, la que nos permite movernos y sentirnos en igualdad de oportunidades, la que nos permite ser tratados en igualdad jurídica para los mismos supuestos, la que nos garantiza derechos individuales inalienables como la vida, la libre elección de nuestra conducta moral, de nuestra educación, de nuestra manera de expresarnos, de nuestra lengua. Una nación que, lejos de excluír el legítimo amor hacia lo que nos es más cercano, lo potencia sobre la base de que, precisamente la suma de todo ello, tiene como resultante algo más grande, que nos permite vivir más libremente, y más cómodamente. Hoy, esta nación de Libertad, de Igualdad ante la Ley, de respeto a los demás, a su diversidad, y de solidaridad entre sus gentes, tiene un claro nombre y es necesario reivindicarla: España.

viernes, 12 de octubre de 2007

Discurso 12 de octubre en La Coruña (Coruña Liberal)


Queridos compatriotas,

Hace más de cinco siglos, un 12 de octubre, un grupo de héroes culminaba una aventura que cambiaría para siempre la historia de la Humanidad. Y lo hacía en nombre de un pueblo, de una cultura, de una nación. Cinco siglos después, nosotros recibimos el legado de aquellos héroes. Recibimos y honramos una cultura presente en todo el mundo, una lengua hablada por cientos de millones de personas, a un lado y a otro del océano que nuestros descubridores cruzaron. Y tras cinco siglos, hoy nos enorgullecemos de haber superado duras pruebas y de haber logrado una convivencia democrática, en paz y en Libertad. Una convivencia de ciudadanos libres e iguales ante la Ley, amparados por la Constitución de 1978 y unidos en torno a nuestra bandera y nuestro Rey. Porque eso es precisamente lo que simboliza la bandera que tenemos ante nosotros: Libertad, Unidad, Democracia y Justicia. Muchos esfuerzos y grandes sacrificios han sido el triste peaje que hemos debido sufrir para llegar a este momento histórico que empezó hace casi treinta años. Y esto ha sido un trabajo de todos. Porque la nación somos todos. Hoy, ante esta bandera, se hace necesario defender lo obvio. Se hace necesario defender que los símbolos de la nación a la que tenemos el orgullo de pertenecer no entienden de circunstancias políticas, ni de intereses espúreos. La bandera que ondea ante nosotros no excluye a nadie, no resta, no divide, no otorga privilegios, no merma la libertad. Antes al contrario, la bandera que nos une, la corona que nos representa, tienen un significado bien distinto. Son símbolos de Unión, de Convivencia, de Democracia, de Libertad y de Igualdad entre sus gentes. Representan una España, una nación, de la que nos sentimos legítimamente orgullosos. Hoy, España representa un concepto de sociedad abierta, libre, moderna, democrática. España es el resultado natural de siglos de brillante historia común, a la que tan profusamente han contribuído personas y gentes de todos sus rincones. Se hace necesario invocar aquí, en este rincón español del noroeste, en nuestra querida Galicia, en nuestra hermosa y liberal Coruña, la grandeza de nuestra cultura común, y de los personajes gallegos sin los que es imposible comprender nuestra España como Valle, como Don Camilo o como la gran Rosalía, por citar sólo algunos ejemplos.

Queridos compatriotas,

No creo escandalizar a nadie si afirmo que estamos ante un momento trascendental de nuestra historia. De un tiempo a esta parte venimos observando síntomas preocupantes de degeneración de la convivencia. Asistimos a un permanente cuestionamiento de los elementos que nos unen y a una exaltación cada vez más agresiva de consignas que nos dividen. Hoy, se esconde nuestra bandera y se cuestiona nuestra historia y nuestra misma existencia. Incluso hay quien personaliza sus odios contra nuestro más alto representante, contra nuestra corona. Y permitidme que hoy, en el día de nuestra nación, de nuestra cultura, en el día de España y de la Hispanidad, haga público un homenaje expreso hacia su más alto representante, su Majestad el Rey Don Juan Carlos. Su labor y su trabajo, su fe en España y en su progreso, su generosidad y empeño en que nos dotáramos juntos de un sistema democrático, moderno y de convivencia en paz, es y será siempre reconocido por todos los españoles.

Queridos compatriotas,

Honrar nuestra historia común, nuestros símbolos y nuestro modelo de convivencia, es honrar a todos y cada uno de los españoles, sin distinción de credo, ideología o condición. Todos somos España. No hay mejor síntoma de progreso y modernidad de una nación que conocer y honrar su historia, sus gentes y sus símbolos, de una manera tranquila, serena, pero también orgullosa. Decir España es decir los ciudadanos que la forman, cada uno con sus peculiaridades, con sus tradiciones, pero todos unidos para avanzar con más fuerza, para progresar, para convivir en armonía. No hay en el concepto de nación española una idea negadora e intolerante, sino un tronco común compartido por todos, enriquecido por la diversidad de sus gentes. Por ello, es para mí un honor poder expresar públicamente mi orgullo por pertenecer a esta gran nación. Creo hablar en nombre de todos los presentes cuando expreso mi firme voluntad de seguir escribiendo juntos páginas de nuestra historia. Creo que todos, absolutamente todos, somos importantes en nuestro común proyecto. Creo que es hora de abandonar las hipotecas, los lastres, y luchar por aquello que con tanto trabajo conquistamos hace casi treinta años. Defender hoy España y sus símbolos es defender la Libertad y la Democracia.

Hoy, 12 de octubre, no quiero acabar estas humildes palabras sin hacer una última reflexión. No quisiera dejar pasar la oportunidad de rendir un sentido homenaje a todos aquellos que creen en España, y que arriesgan su bienestar y a veces su vida, por defender la libertad de todos los españoles. Por ello, quisiera rendir un sentido homenaje, a las víctimas del terrorismo, asesinadas por el mero hecho de ser o sentirse españoles, a Regina Otaola, amenazada de muerte por no querer avergonzarse de la bandera española, a Albert Rivera, por defender la libertad de sentirse legítimamente español y catalán, y a todos aquellos que luchan diariamente porque no se impongan restricciones a nuestros hijos a la hora de expresarse en el idioma común de todos los españoles. De igual forma mi más sentido homenaje a todos nuestros militares y voluntarios que, en tierras lejanas, contribuyen a que muchas personas en el mundo identifiquen España con Libertad y con Justicia, y especialmente a las familias de aquellos que dejaron su vida en esa honorable labor.

Queridos amigos, hoy, 12 de octubre de 2007, quisiera que alzárais la voz a favor de todo aquello que nos une, a favor de la Convivencia, de la Unidad, de la Democracia, de la Libertad, de la Igualdad de las personas, que alzárais la voz para rendir homenaje a España, a su bandera y a su Corona. Por eso os pido que me acompañéis y gritéis conmigo:

¡Viva la Libertad!, ¡Viva el Rey!, ¡Viva España!

sábado, 29 de septiembre de 2007

Las medidas de Rajoy

Acabo de echar un vistazo rápido a las medidas propuestas por el PP para la vivienda y me resultan un intento patético de pseudoprogresismo barato. Una vez más se predica la mendicidad del ciudadano que pide a las puertas de papá Estado para que éste le "regale" cosas. Resulta patético comprobar cómo nuestros políticos intentan por todos los medios que no tengamos disponibilidad sobre nuestros bien ganados sueldos.

Veamos:

1.-Que una de cada dos viviendas que se construyan cuenten con una superficie de referencia de 80 metros cuadrados y no cuesten más de 160.000 euros. -> Señores, ¿quiénes son ustedes para determinar cómo ha de construir una empresa privada y a qué precio? ¿se suma el PP al carro de identificar especulación con algo malévolo?¿existe un derecho a comprar una casa?¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

2.-Fomentar una reserva de suelo para vivienda protegida (vpo) de entre el 30 y el 50 por ciento del total.--> ¿Pero no eran éstos los que proponían "liberalización del suelo? ¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

3.-Establecer marcos legales y reducir los tiempos de tramitación, para que los desarrollos urbanísticos sobre suelo nuevo se efectúen en dos años. ---> ¿más leyes y reglamentos?¿no sería mejor optimizar las que existen y hacer que se cumpla realmente?¿otra vez el vicio de "como no se cumple la ley, la cambiamos por otra"?¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

4.-Revisar la financiación local para incentivar a los ayuntamientos que trabajen y contribuyan en la generación de "suelo asequible para la construcción de viviendas asequibles". -->¿alguién sabe qué demonios quiere decir esto?¿quizá reducir las comisiones de los concejales de un tres a un dos y medio por ciento para "recalificar" los terrenos de las sociedades de sus amigos y/o familiares?¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

5.-Un acuerdo entre el Instituto de Crédito Oficial (ICO) que establecerá, junto a las entidades financieras, un sistema de seguros que permita a las familias con menos posibilidades beneficiarse de las bajadas de los tipos de interés pero no verse perjudicadas por las subidas. ---> ¿esto es España o Cuba?¿el Estado "avalando" operaciones mercantiles de particulares?¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

6.-Establecer un nuevo modelo de vivienda de precio limitado -entre la vpo y la libre- para familias con hijos, con ayudas adicionales y deducciones especiales en función del número de hijos. --->¿precio limitado es igual a "calidad limitada"?¿sobre quién recaerá el "abaratamiento"?¿subvencionar de nuevo la construcción?¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

7.- Un cheque vivienda en función de los ingresos, programas para mayores y discapacitados -en el que cambiarán su vivienda libre por otra de vpo de acuerdo con sus circunstancias- y la modificación de la Ley de Propiedad Horizontal. ---> ¿al final de nuestra vida "regalamos" nuestra propiedad?¿planificamos la vida hasta este extremo? ¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

8.-Crear un gran parque público en régimen de alquiler en suelos de patrimonio público, desarrollará un programa de impagos de rentas y llevará acabo un plan de choque para poner viviendas vacías en el mercado. ---> ¿más suelo público?¿programa de impago de rentas = incentivos al inquilino para que deje de pagar porque se hace cargo el Estado de su caradura?¿asume el Estado la deuda de los morosos profesionales?¿generalizamos, una vez más, la responsabilidad civil de la estafa para que la paguemos todos los españoles?¿plan de choque para poner viviendas vacías en el mercado?¿se dan cuenta de la contradicción? No hace falta ningún plan de choque (¿o es de "checa"?), hace falta simplemente seguridad jurídica y más mercado libre.¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

9.-Propone ayudas a las hipotecas como la eliminación de las comisiones de cancelación, sistemas de conversión de fijo a variable, nuevos productos como la hipoteca joven o de familia y la eliminación del vacío legal de las reunificadoras de deuda. ---> ¿esto es una propuesta del PP o del BSCH?¿impondrán a la banca privada un modelo de hipoteca?¿fundará el PP un banco?¿qué hemos hecho para sufrir al tal Costa?

10.-Modificar la Ley de Enjuiciamiento Civil, crear juzgados especializados en vivienda, impulsar los sistemas de arbitraje y generar inmuebles de alquiler con opción a compra. --> ¿más juzgados ad hoc?¿más clientelismo funcionarial?¿qué tiene que ver la última de estas tres propuestas con las dos anteriores?¿cómo se "generan" inmuebles de alquiler con opción a compra?¿será obligatorio? Pobres propietarios...¿qué hemos hecho para sufir al tal Costa?

11.- Reducir los impuestos como el IRPF, IBI, IVA, ITP, IAJD, ICIO y el plusvalías de los municipios, así como la reducción y "periodificación" de gastos de escritura y notaría. ---> De lo poco coherente:¿cuándo se darán cuenta nuestros políticos de que la mejor manera de que la gente tenga dinero es que tenga trabajo, y de que cuando tengan trabajo no se les "despoje" (¡Ah, gran Bastiat!) mediante impuestos? Pero una matización: ¿cómo convencerán a los ayuntamientos para que "renuncien" a sus competencias tributarias? ¿habrá hecho esta propuesta realmente el tal Costa?


Conclusión: Por favor, ¿algún liberal en el Partido Popular?¿Algún médico en la sala?

P.D.- Lo de Costa es una cuestión de estilo literario, pues nada hay contra el personaje, que incluso me consta que es un gran profesional. Él tan sólo representa como tantos otros, y en su buena fe, la corrupción ideológica de España, el virus antiliberal y la falta de confianza de los políticos en la capacidad de la propia sociedad para corregir los errores que, generalmente, ellos mismos crean "interviniendo" en el mercado como aciagos demiurgos.

Saludos liberales.

jueves, 20 de septiembre de 2007

La reivindicación del cristianismo

Harto. Esa y no otra es la palabra que define mi estado de ánimo con tanta tontería y cobardía. Estoy harto de esa nueva moda de que la escuela "no es el lugar para estudios religiosos". Esta sóla aseveración va en contra de la Historia con mayúsculas: negar la importancia de la Iglesia en la historia del conocimiento es de una soberana estulticia. Miren ustedes: yo no tengo ningún problema en admitir que soy cristiano y que creo en los valores de Occidente. ¿Y alguien puede negar que valores como la Libertad, la Justicia, la Vida, la Solidaridad,la defensa del individuo, la defensa de las minorías contra el absolutismo, no están expresamente reconocidas en el discurso cristiano? ¿Pero es que resulta que Europa se ha construído moralmente ajena al cristianismo?¿No se ha asimilado desde tiempos remotos Occidente y Cristiandad?¿Por qué esa obsesión porque el Estado enseñe a nuestros hijos los derechos fundamentales recogidos en la Constitución y se niegue a nuestros hijos la opción de enseñarles los principios morales que han inspirado las Constituciones mismas? Nadie en su sano juicio puede afirmar que se pueden defender principios por el sólo hecho de que estén recogido en textos con rango de Ley Fundamental. Esto es puro positivismo. Los principios morales no existen porque están recogidos en las leyes. No están sometidos a las coyunturas políticas y por esto deben ser ajenos a ellas. Los princpios morales se asientan en la espiritualidad. Nadie que no tenga principios morales bien arraigados, que CREA en ellos, que los entienda como propios, puede estar dispuesto al SACRIFICIO, esto es, a la solidaridad, a procurar el bien, a evitar el egoísmo, a colaborar al bien común. No se puede creer en valores como si éstos fueran meras frases hechas. Los valores como la defensa de la Vida y de la Libertad no se defienden si no SIENTEN. La moral es previa a la Ley, e, incluso, si la Ley contradice la moral, pierde su legitimidad. ¿Cómo explicar a un niño la necesidad de sacrificarse por los demás, de defender la vida, de defender la justicia, como un bien supremo, si mañana la Ley cambia e impone discriminaciones e injusticias ajenas a estos princpios?¿Cómo convencerle de que olvide su egoísmo si esas nuevas leyes le benefician en perjuicio de otros? No empecemos la casa por el tejado: los valores cristianos, germen de Occidente, no pueden obviarse, porque, de lo contrario, este vacío se llenará pronto con algo terrorífico para un sociedad: el nihilismo, el relativismo moral, e, inexorablemente, la decadencia.
Menos positivismo, y más principios.

Saludos liberales.

lunes, 10 de septiembre de 2007

RE-EDUCACIÓN PARA LA CAMARADERIÁ

Leo con estupor que la justificación de la Ministra de Educación para imponer Educación para la Ciudadanía (EdC) es que sus contenidos son, entre otros (esos “otros” no los menciona la Ministra…), la Declaración Universal de Derechos Humanos y los principios Constitucionales, y que “le resulta difícil comprender cómo alguien puede oponerse a estos principios”.

La argumentación es maquiavélica y de una cara dura asombrosa, propia de la demagogia que la izquierda lleva en sus genes. O esta señora no se entera de nada, o actúa de mala fe. No hay otra opción. Intentaremos explicarle amablemente a la señora Ministra de “Re-educación socialista”, (perdón, “Re-educación” socialista), nuestros argumentos.

En primer lugar, señora Ministra, la negativa de los que amamos la Libertad a esa asignatura es ajena a los contenidos de la misma. El debate, que usted interesadamente circunscribe a los contenidos, de los que, por cierto, sólo describe los que le interesan, no esta en qué es lo que se enseña a los niños en EdC, sino la propia existencia de EdC.

Se lo diré más claramente: si EdC enseñara a nuestros niños los principios morales del Liberalismo, y sus textos estuvieran influenciados por Hayek o Mises, yo, como liberal, me opondría igualmente con todas mis fuerzas a esa asignatura. El debate, señora ministra es que ni usted, ni ningún gobernante tiene autoridad moral para inculcar “valores” a nuestros hijos. Sean estos valores tan loables como la Declaración Universal de Derechos Humanos, o tan “opinables” como “enseñar a gastar a nuestros hijos” , “creer en el desarrollo sostenible y el calentamiento global” o a “asumir todas las opciones sexuales con la misma naturalidad”.

La labor de su ministerio debería limitarse, y no es poca tarea, a conseguir una buena capacitación intelectual, objetiva y profesional de nuestros menores, y un mínimo común denominador para toda la nación, que no permitiese desigualdades como cercenar la posibilidad de expresarse en español, o limitar los conocimientos geográficos e históricos de nuestros pequeños a la comunidad autónoma a la que pertenezcan. El resto, querida ministra, no es tarea suya ni de ningún político. Usted no tiene derecho a inculcar valores a mis hijos. Léase la Constitución que dice defender.

En segundo lugar, presume usted que el hecho de que algunos padres no conozca los derechos fundamentales a través de cacareadas leyes, significa que son unos ignorantes que no sabrán educar a sus hijos en la tolerancia, el respeto a la ley, y la defensa de la Libertad. Ignora usted que, sin EdC, los padres hemos educado a nuestros hijos en libertad, y no se ha producido ningún cataclismo por ello. ¿Por qué ese empeño en cambiar un modelo que funciona desde hace siglos? ¿Por qué esa repentina prisa porque el Estado se apropie de las conciencias de nuestros hijos? ¿Qué argumento moral y legal existe para creer que el Estado puede educar mejor a mis hijos que yo mismo? ¿Es la sociedad española una sociedad primitiva, analfabeta, cruel, a la que haya que “educar” por parte de sus ilustradas señorías?

¡Qué nivel de desprecio hacia quienes les pagan los sueldos, señora ministra! ¡Qué prepotencia la suya y la de su gobierno al pensar que los españoles somos idiotas que no sabemos hacer la o con un canuto!

En conclusión, señora ministra, en la humilde opinión de quien es dueño de su Libertad y no inquilino de la misma, permítame aconsejarle a usted y a su gobierno: limítense a hacer cumplir las leyes, y, en especial, esas que dice usted que no se comprende como se puede uno oponer a ellas: la Declaración Universal de Derechos Humanos y la Constitución española. Y, háganos un favor, demuéstrenoslo con hechos: defienda esos principios y luche porque todos los españoles puedan escolarizarse en español en cualquier parte del territorio; luche porque todos los españoles conozcan la historia de su nación, y los aspectos geográficos de la misma; luche porque su gobierno no permita galescolas, ikastolas, y demás intentos de adoctrinamiento antiespañol y liberticida.

Y, por cierto, empecemos por algo bien sencillo, señora ministra: luche porque en Cataluña, País Vasco y Galicia, se enseñe a todos los niños esa Constitución y los símbolos que nos representan a todos, incluída la bandera.

Atentamente, un humilde ciudadano que, con sus esfuerzo, le paga a usted su, a buen seguro, generoso sueldo.

Saludos liberales.

sábado, 8 de septiembre de 2007

ESTANCIAS LIBERTARIAS ESCRITAS EN LA CERCANÍAS DE UNA "GALESCOLA"

Cuando todavía no percibimos la letra y música del Himno de la "Nazón de Breogán", que se pretende enseñar a los mas tiernos infantes cuyos progenitores van a hacer víctimas de un proceso en el que el nacionalismo devora la Galicia real ("gulaescola") y revurgita su "Galiza" alimentando a esos pequeños con su producto totalitario; debe abrirse un debate de fondo. Se ha hecho patente que "un sistema educativo obligatorio, financiado mediante impuestos, es el modelo completo del Estado totalitario" (Isabel Paterson, "The God of the Machine", N.York, 1943), realidad que se ejemplifica en los sucesivos procesos de limpieza lingüística ejecutados por los nacionalismos periféricos y que también cristaliza en la llamada Educación para la Ciudadanía. El complejo nacionalsocialista es un inmenso pulpo que pretende estrangular el cuerpo, la propiedad y la mente de cada ciudadano desde su infancia, convirtiendo en tarea sobre humana romper ese dominio total del poder político sobre la vida de cada persona.

Todo ello hace necesario una reflexión a fin de establecer una estrategia para la libertad, para que "La influencia nociva del gobierno que trata de moldear a la juventud en la dirección que le conviene al Estado sería reemplazada por las acciones voluntaria y libremente elegidas; en resumen, por una educación genuina y verdaderamente libre..." (Murray N. Rothbard, "El Manifiesto Libertario"). En este contexto situo las siguientes estancias:

I.- La violencia escolar.

Este fenómeno es una evidente manifestación del descontento de los jóvenes que son sometidos compulsivamente a un sistema educativo de naturaleza "carcelaria", donde se tiraniza a miles de chicos disconformes e inadaptables dentro de la estructura escolar. Siguiendo a Albert Jay Nock ("The theory of education in the US, Chicago, 1949; "Memoirs of a supeflous man, N.York, 1943), la obligación de que todos los jovenes acudan a la escuela hasta una determinada edad, supuestamente por su bien, deforma las vidas de quienes no tienen capacidad para estudiar y priva a los verdaderamente dotados de una instrucción apropiada, asi la tendencia hacia la instrucción escolar universal es un error fatal.

II.- La instrucción pública obligatoria: Un instrumento totalitario: Un ejemplo extrapolable a la Educación para la Ciudadanía.

El Estado de Oregón, a principios de la década de 1920, no conforme siquiera con las escuelas privadas certificadas por el Estado, aprobó el 7 de Noviembre de 1920, una ley por la cual se proscribían las escuelas privadas y se obligaba a todos los niños a asistir a escuelas públicas. De este modo alcanzaba su culminación el sueño de los educacionistas. Por fin todos los chicos serían introducidos dentro del molde "democratizante" de la educación uniforme impartida por las autoridades estatales. Afortunadamente, la ley fue declarada inconstitucional por la Corte Suprema de los Estados Unidos en 1925 (Pierce vs, Society of Sisters, 1 de Junio de 1925). La Corte declaró que " el niño no es un mera criatura del Estado", y afirmó que la Ley de Oregón se hallaba en oposición a la "la fundamental teoría de la libertad sobre la cual se basan todos los gobiernos de esta Unión". Las fuerzas que intentaron proscribir totalmente la educación privada competitiva en el estado de Oregón estaban lideradas por el Ku Klux Klan, entonces poderoso en los estados del norte, que aspiraba a destruir el sistema educativo parroquial católico y obligar a todos los ciudadanos a asistir a escuelas públicas que les inculcaran por la fuerza un neo-protestantismo y una "americanización". Es interesante destacar que el Klan opinaba que esa ley era necesaria para "preservar las instituciones libres". Es interesante meditar sobre el hecho de que el sistema de educación pública "progresista" y "democrático" del que se hacía tanto alarde tenía entre sus más ardientes defensores a los subgrupos mas intolerantes de la vida estadounidense.

(Fuente: Murray N. Rothbard, "El Manifiesto Libertario").

III.- La imposición lingüística en la educación.

Uno de los objetivos mas patentes de la educación pública obligatoria ha sido oprimir y debilitar a determinados sectores de la población con la intención de obligarlos a abandonar su propia lengua para que adoptaran las de los grupos gobernantes. El fenómeno no es nuevo, asi tenemos ejemplos como los ingleses en Irlanda y Québec y todas las naciones de Europa Central y Oriental, y en Asia, coaccionaron a determinados grupos de población en escuelas públicas organizadas por sus clases dirigentes. Como bien argumenta Von Mises "en paises donde las lenguas están mezcladas,..., la adhesión continua a una política de educación obligatoria es absolutamente incompatible con los esfuerzos para establecer una paz duradera". Resulta evidente que en áreas donde conviven varias lenguas, la escuela es un premio político de suprema importancia, en tanto en cuanto institución pública y obligatoria.

(Von Mises, "The free and prosperous Commonwealth", Princeton, NJ, 1962)

IV.- Un conjunto de preguntas relevantes, y alguna respuesta.

¿Qué quiere decir que el gobierno debería educar al pueblo?, ¿por qué debería ser educado?, ¿para que sirve la educación?, ¿para hacer de las personas buenos ciudadanos?, ¿y quién determinará qué es un buen ciudadano?, el gobierno, no hay otro juez; ¿ y quién dirá como se puede formar estos buenos ciudadanos?, nuevamente, solo el gobierno.

(Herbert Spencer, "Social statics", Londres, 1851).

V.- Premisa para un debate.

La abolición de la normativa de escolaridad compulsiva y la devolución a los niños de su libertad intelectual, determinaría que podamos ser una Nación (España) de gente más productiva, interesada, creativa y feliz.


Fdo.- Ancho Quintana (colaborador)

EL NEO-PSOE

Bajan revueltas las aguas políticas estos días por la aparición de Unidad, Progreso y Democracia, el nuevo partido capitaneado por Rosa Díez y Fernando Savater, entre otros. En principio, y desde un punto de vista democrático, bienvenidas las nuevas siglas. Ahora bien, creo sinceramente que UPD nace como el derecho al pataleo de un grupo de reconocidos socialistas, que no han tenido la gallardía de, conociendo perfectamente cuál es la causa de la enfermedad, es decir, el izquierdismo, proclamar en voz alta la incompetencia de las ideologías que se basan en el intervencionismo en la sociedad, en un concepto de la sociedad como algo a corregir y mejorar "desde arriba" por un conjunto de mentes ilustradas que no aceptan comportamientos que no se ajusten al óptimo idealizado que éstos tienen, pero que, como ya he dicho en otro sitio, ellos no practican en su propio entorno.

Porque no nos engañemos. El nuevo partido es lo más parecido a poner el contador a cero para iniciar la partida justo cuando el contrario está a punto de rompernos definitivamente el servicio y ganar el partido. Pero si volvemos a empezar con la misma estrategia, y ante el mismo contrincante, indefectiblemente la partida volverá a desarrollarse de la misma manera. Es, simple y llanamente, ganar tiempo.

Estoy plenamente convencido de que UPD está abocado a una futura unión con el PSOE una vez que la actual dirección del mismo caiga (los españoles lo quieran...) en las elecciones. Todos los votos que éste partido recabe irán a parar directamente al saco del PSOE.

Porque, a mi juicio, lo que ha nacido estos días ha sido el neo-PSOE, un partido creado y dirigido por personajes muy cercanos al PSOE de Felipe González, partidarios de políticas similares a las practicadas en su ominosa etapa. No podemos olvidar frases de Rosa Díez como: «Felipe González es algo indisoluble con la historia del socialismo español y con la historia de España. Es el principal protagonista de unas páginas globalmente brillantes de nuestra Historia», o actuaciones de la misma criticando que se investigasen los crímenes de los GAL. Ni que decir tiene que el "alabado" Savater guarda en su hemeroteca apoyos a la negociación con ETA, insultos a la AVT y a su presidente, insultos a quienes se oponen a Educación para la ciudadanía...etc

En mi opinión, el neo-PSOE nace como un partido meramente coyuntural y oportunista, y pretende tender una última muleta al PSOE para que vire, exclusivamente, su política marcadamente nacionalista.

Ser liberal es, a mi humilde entender, ser crítico, no creer en ídolos ni en falsos profetas y ser objetivo. Y un análisis objetivo de este neo-PSOE no puede ser más desalentador. De entrada, critica al PP por no ser un partido suficientemente valiente, pero ellos no condenan la historia trufada de corrupción, crímenes y deslealtades de su ideario. No nos dicen por qué ellos sí son válidos para defender unos postulados que el PP lleva defendiendo (con mayor o menor acierto, eso sí) durante más de una década. ¿Hemos de creer que los originales causantes de los males de nuestra nación: antimilitarismo, antiamericanismo, antireligiosidad, antiliberalismo, antipatriotismo, durante la corrupta época de gobiernos de González son ahora unos dulces angelitos que creen en la bandera nacional y que no intentarán adoctrinarnos de nuevo a todos a través de los libros de cierta editorial en las escuelas de nuestros hijos? ¿Padece España sólo el mal nacionalista? ¿O más bien el mal nacionalista lo padecemos por la falta de confianza histórica de la izquierda en la unidad de la nación española?

Por último, no quiero dejar pasar la oportunidad de incluír en estas humildes reflexiones una pregunta que surge desde lo más profundo de mis entrañas escépticas y conspiranoicas:

¿Tendrá que ver la formación de este partido con ciertas desavenencias entre el principal grupo mediático del PSOE y el gobierno ZP? ¿Estará ese grupo mediático jugando a demiurgo? ¿Quién es uno de los filósofos de referencia de ese grupo mediático? Dejo la reflexión en el aire. Mi respuesta a la misma se inclina por momentos a definir al neo-PSOE como el PDCS = Partido Dependiente de la Coyuntura Socialista.


Saludos liberales.

viernes, 7 de septiembre de 2007

DIATRIBAS LIBERALES




Una de las cosas que más irracionales encuentro en el comportamiento de los denominados “progresistas” es la falta de coherencia entre sus opciones personales, aquéllas que ellos eligen libremente y sin coacciones, por considerarlas más óptimas para la consecución de su beneficio, y sus opciones políticas. Un elemento común a los progresistas (común por lo habitual, porque en esto, como en todo, hay honrosas excepciones que confirman la regla) es que piensan según viven, pero jamás viven según piensan.

En el campo de la educación es sangrante la falta de coherencia: los hijos de los próceres de la izquierda (incluídos afamados nacionalistas) suelen escolarizarse en colegios privados y en la lengua común de España, además del inglés, mientras cercenan la posibilidad de que el resto de los mortales puedan siquiera estudiar en español. Sería muy conveniente, y aleccionador para todos, una campaña de “outing” para conocer de primera mano dónde estudian los hijos de los próceres socialistas y nacionalistas, y cuánto cuestan estos colegios y cuáles son sus programas educativos.

Si analizamos aspectos como el religioso, la incoherencia roza la esquizofrenia. Políticos españoles que se llenan la boca de ser buenos católicos (y prefieren morir a matar…y ponen la otra mejilla) ni siquiera pestañean al asistir a una misa anticatólica acompañados de elementos subversivos anticristianos reconocidos. Incluso hay presidentes de gobierno con manifiesta inquina hacia la Iglesia Católica que “obligan” a sus hijos a recibir el sacramento de la Primera Comunión…y se casan por la Iglesia.

En el plano económico la cosa ya es de sinvergüenzas redomados. No conozco a ningún socialista que redistribuya sus propios ingresos. Más bien al contrario, muchos de sus gobiernos y políticos “redireccionan” nuestros ingresos…hacia sus bolsillos. Y es que ya se sabe que “el dinero público no es de nadie”.

Y finalmente, nos encontramos con su cacareado “pacifismo”. Y la pregunta es obvia: ¿ha existido alguna ideología más destructiva y violenta que el socialismo en todas sus vertientes? Es francamente difícil de entender cómo nuestros políticos se rasgan las vestiduras por una intervención militar en Irak en la que España no participó militarmente, y sin embargo se olvidan de algo que yo no podré olvidar jamás: Marta Sánchez emulando a Marylin Monroe y cantando aquello de “soldados del amor” a los pobres reclutas de reemplazo OBLIGADOS a combatir contra el malvado Sadam, en pleno Golfo (o “golferío) Pérsico…

En fin, puro relativismo moral.


Saludos liberales.


jueves, 6 de septiembre de 2007

Leónidas y Zapatero

Queridos amigos,

Ciertamente Leónidas y sus trescientos eran los nuestros, como lo han sido siempre quienes han dado su vida por proteger la Libertad, como lo son todos los soldados americanos que dieron su vida por liberar europa, como lo fueron nuestras tropas en Lepanto, como lo son los integrantes de asociaciones y partidos no naZionalistas en el País Vasco.

Pero centrando el tema de Leónidas, la batalla de las Termópilas es quizá uno de los primeros intentos de los llamados Persas, (y en este concepto podríamos incluír hoy a los islamistas, salvando las distancias históricas), de imponer su civilización en todo el mundo. El carácter imperialista de esa parte del mundo es algo cíclico a lo largo de la historia, si acaso dormido durante generaciones, pero presto a levantar sus armas contra Occidente a la menor muestra de debilidad de nuestra civilización.
El ejemplo de Leónidas es una constante en la historia: las muestras de valor y sacrificio por ideales nobles suele amilanar a los canallas, a los tiranos, y las almas cobardes que prentender subyugar a los pueblos cercenando su libertad, protegiendo sus intereses y sometiendo a todos los hombres a su voluntad. El problema suele estar en sociedades como la nuestra que, ebrias de conformismo y desidia, aderezadas con grandes dosis de analfabetismo e ignorancia histórica, han olvidado que la Libertad nunca es gratis, y no son conscientes de su potencial. Nos hemos convertido (y el ejemplo de nuestro Norte es válido en esta teoría) en seres que "agigantamos" a nuestros enemigos, los tememos, les damos más importancia de la que realmente tienen por una sencilla razón: no somos conscientes de nuestro potencial, de nuestros logros. Tendemos a pensar que los enemigos de la Libetad son valientes luchadores y perdemos de vista un hecho esencial: si son enemigos de la LIbertad es porque son DEBILES, porque no creen en sus posibilidades y porque, en general, son COBARDES.

Pasa algo parecido en nuestra patria, donde engordamos el bicho naZionalista, dándole una importancia que no tiene realmente: larga es la tradición de traiciones y retiradas del nacionalismo vasco y catalán (por no hablar del inexistente gallego). Pero tenemos un presidente pusilánime, a años luz de personajes como Leónidas, que prefiere entregar la Libertad a plazos para que no se note, antes que acometer una batalla en la que contaría con muchos más efectivos y mejores valores que el contrario, y, lo que es peor, donde con toda probabilidad nuestros enemigos huirían en retirada al menor atisbo de enfrentamiento con las fuerzas de la LIBERTAD.

En conclusión, y volviendo al tema de Leónidas, la trayectoria de nuestro presidente es opuesta a la del valiente rey espartano. Por decirlo con claridad meridiana: hoy, Zapatero sería nuestro Efialtes, un personaje que, lejos de creer en los valores por los que luchaban sus hermanos, prefirió TRAICIONAR a los suyos y allanar el camino de Jerjes, permitiendo que éste aniquilara a Leónidas y los suyos.

Pero de la Historia se aprenden valiosas lecciones: el ejemplo de Leónidas sirvió para que toda Grecia se levantara en armas. Leónidas dió a sus compatriotas el tiempo necesario para que se organizaran y vieran el peligro real de Jerjes. Sirvió de ejemplo y de orgullo a los soldados helenos, y permitió, con su sacrificio, el triunfo de la Libertad. ¿Y cómo pasó a la Historia Efialtes?...como todos los amantes de la Libertad esperamos que pase un tal Rodríguez....


Saludos liberales.

El virus y la guardería

De todos es sabido que los niños en las guarderías son blanco fácil para todo tipo de virus que sus compañeros porten o desarrollen. Los primeros catarros, las primeras bronquitis, las primeras fiebres…Y es que el contacto diario de los pequeñines entre sí hace que compartan o “socialicen” sus virus. Lo que desconocíamos hasta ahora es que también los profesores pueden, y ahora incluso deben, por Ley, “inocular” a nuestros hijos virus tan dañinos para la convivencia como el odio a sus vecinos y el odio a lo diferente. Es un virus letal que se introduce en las mentes de las personas y que tiene fácil diagnóstico si se observan algunos de sus síntomas de manera objetiva.
A saber:

1.- Aparición de odios insospechados hacia aquellos que no piensan ni hablan en la lengua que utiliza el enfermo. Ya se sabe: se debe “pensar” y “vivir” en un idioma determinado para ser aceptado en la tribu. En procesos avanzados de la enfermedad incluso pesa más el idioma en el que se hable que la preparación técnica u objetiva para desempeñar cargos de responsabilidad.

2.- La permanente justificación de la incompetencia propia en la invasión extranjera, sea ésta cultural, económica, e incluso, en estadios graves de la enfermedad, con esquizofrenia aguda, invasión militar (léase el caso del vasco que cree que existe una ocupación militar y policial española…). Un claro ejemplo de este síntoma es la crisis general en la esclerotizada Cataluña (otrora referencia de mezcla y diversidad, y hoy tristemente aldeana y acomplejada).

3.- La ensoñación y formación de una historia inventada, que en ciertas latitudes norteñas llega hasta el éxtasis de nombrar al “pueblo elegido” nación de un tal “breogán” del que no se conoce padre ni madre que lo crió, y en otros casos más al norte siguen los dictados de un pequeño “führer” absolutamente desquiciado y trasnochado, cuyos libros guardan celosamente cual santo grial. Esta enfermedad, si se agudiza, llega al extremo de negar la romanización, y reivindicar el barbarismo, que es como ir en dirección contraria por una autopista y clamar contra los locos que vienen de frente.

4.- La mitificación de lo propio sobre lo ajeno. Y es que incluso los más levemente infectados (incluso aquellos que se suponen vacunados y que se agrupan en partidos supuestamente inmunes al virus) creen firmemente que la “morriña” es exclusiva de los gallegos, o que éstos fueron los únicos emigrantes, o que el gallego se hablaba antes de la dictadura de Franco en todos los ámbitos (nada más lejos de la realidad histórica). Igualmente, los vascos creen firmemente que sus hombres son más fuertes, más listos y más guapos que los “maketos” y los catalanes creen firmemente que son mejores en la gestión de los recursos (olvidan que esos recursos provienen directamente y en su mayoría, de lo que producen los odiosos españoles), y tienen incluso un equipo que es “més que un club”…

Pero con diferencia, lo peor de esta maldita enfermedad, es que los efectos secundarios que producen en pueblos enteros, léase el emprobrecimiento cultural, económico, social y la ausencia de Libertad, no se manifiestan hasta que se produce lo inevitable: el colapso. Y es entonces, cuando el efecto del virus reacciona con toda su violencia, y se produce una reacción en cadena que multiplica exponencialmente los efectos de la enfermedad. Todos los males que ésta produce se deben, a juicio de sus esquizofrénicos pacientes, a los tratamientos que existen para su cura: dosis generosas de libertad, igualdad ante la Ley y respeto al individuo. Y el paciente se vuelve agresivo, y no sólo se niega a aceptar la medicina de la LIBERTAD, sino que trata de que el virus se contagie a los pueblos vecinos. Y rara vez la enfermedad, cuando avanza hasta estos extremos, tiene una cura fácil o definitiva, y deja a los enfermos dos únicas opciones: o la rehabilitación libre de aquéllos que, en momentos de lucidez, son conscientes de su enfermedad, o el aislamiento de los enfermos, la cuarentena.

Resumiendo, como toda enfermedad, la mejor cura y la más sencilla es la prevención. Así que ya sabe usted, querido ciudadano, que sólo tiene dos opciones para hacer frente a esta epidemia vírica que pretenden extender indiscriminadamente entre la población infantil: o bien se conforma con pedir que le rebajen el precio de las jeringuillas, para que la inoculación no resulte cara al bolsillo, y mira usted hacia otro lado, y en ese caso usted debería matricular a sus imberbes en las galescolas/ikastolas o similares; o bien se aparta usted de la enfermedad y trabaja conjuntamente con otros padres que ya luchan denodadamente contra el virus infantil que nos quieren imponer, tratando de encontrar la vacuna correcta.

Porque, no lo olvidemos, un niño debe aprender a jugar…pero no con fuego.